Por qué humidificar... para eliminar el polvo


Es importante mantener la humedad relativa (HR) entre 40-60 %, ya que así se minimiza la cantidad de tiempo que el polvo se puede mantener en el aire, forzándolo a que se deposite más deprisa.

Por qué humidificar... para eliminar el polvo

En entornos como centros de datos, salas de servidores, oficinas y hospitales, dependemos de la electrónica para dar un servicio eficiente y operar como debemos. La acumulación de polvo puede provocar infinidad de problemas en electrónica, como sobrecalentamiento por bloqueo del ventilador, lo que puede provocar un fallo del hardware e incluso riesgo de combustión en circunstancias extremas. También puede provocar problemas de rendimiento del sistema, reduciendo la eficiencia en el lugar de trabajo. En este último artículo de nuestras serie “Por qué humidificar para electrónica”, comentaremos varias maneras con las que puede reducir la acumulación de polvo.

Mantenga la electrónica lejos del suelo

Independientemente de qué electrónica tenga, si está colocada directamente en el suelo solo es cuestión de tiempo que esté repleta de polvo. Numerosos escritorios incorporan ahora estantes inferiores que están por encima del suelo para proteger contra la acumulación de polvo, por lo que si tiene un ordenador de sobremesa en el suelo, esta podría ser una alternativa a considerar. Combinado con un control de humedad correcto que regula la humedad del aire, debería ser más sencillo mantener los sistemas computacionales limpios y menos propensos a la acumulación de polvo.

Use cubiertas para polvo cuando sea posible

Ya tenga una pila de servidores o una estación de trabajo computacional, usar una cubierta para polvo en monitores y otros dispositivos electrónicos garantizará que no se acumule polvo en su superficie, incluso bajo unas condiciones de humidificación adecuadas en las que se reduce la generación de polvo. Simplemente quítela cuando trabaje y vuelva a ponerla cuando haya terminado. Sin embargo, asegúrese de limpiar regularmente cualquier cubierta de polvo que tenga, ya que generalmente están hechas de plásticos engomados y pueden acumular polvo fácilmente.

Cubra los cables de corriente

Muchas personas no consideran que el polvo de los cables de corriente sea una amenaza, independientemente de si están usando un ordenador de escritorio o un servidor. Sin embargo, si el polvo continúa acumulándose, puede provocar riesgos de seguridad.

Pruebe a usar cinta aislante para cubrir los cables de corriente que están en el suelo; si están totalmente cubiertos, también se protegerán de que se dañen con los pies. Alternativamente, las esterillas engomadas u otras formas de cubierta serán igual de efectivas. Al mismo tiempo, asegúrese de que las propias salidas de corriente estén protegidas con cubiertas para polvo, por no mencionar las regletas y los alargadores. Una pequeña planificación preventiva es muy valiosa a la hora de proteger entornos basados en la electrónica.

Alergias y polvo

El polvo es el mayor desencadenante de alergias del mundo. Cualquiera que sea alérgico al polvo reacciona a elementos de ácaros o alérgenos animales con trastornos como estornudos, irritaciones oculares o asma. La humedad del aire juega un papel fundamental en el grado de turbulencia de polvo. Los experimentos muestran que la adhesión de polvo “humedecido” a las superficies lisas del suelo aumenta drásticamente por encima del 30 al 40 %. En esta área, el peso de las partículas de polvo también aumenta drásticamente debido a la condensación de agua. Se adhieren entre sí, se agrupan y vuelven a caer rápidamente al suelo.

Por consiguiente, el ámbito óptimo de humedad para minimizar los trastornos de las alergias está entre el 40 y el 60 %.

Mantenga una humedad relativa del 40-60 %

La forma más fundamental de proteger la electrónica de la acumulación de polvo es poner en marcha un control sistemático de la humedad. Al usar un humidificador como uno de los sistemas de enfriamiento/humidificación eléctricos o evaporativos de Condair, podrá gestionar con mucha más eficiencia las temperaturas interiores y los niveles de humedad. Es importante mantener la humedad relativa (HR) entre 40-60 %, ya que así se minimiza la cantidad de tiempo que el polvo se puede mantener en el aire, forzándolo a que se deposite más deprisa. Además, un control adecuado de la humedad puede minimizar los componentes quebradizos, reducir la necesidad de retirar soldaduras y componentes y reducir casos de descarga electrostática (DES).

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